SUBTERRÁNEO
Una mínima tregua, acometer
el cansancio sobre el último asiento.
Aun el túnel simula ser chance
para tanta mirada privada de luz.
Hasta aquí, la suma de los hechos reunidos
en tren de seguir
no vale un cospel.
Y la serpiente que sigue reptando
indiferente al sopor de los iguales.
Habrá que cargar todas las postergaciones
al hombro, según parece,
y atrasar la hora de levantarse hasta
la próxima ocasión.
ANDA
«Si me olvidara de lo que no he sido,
me olvidaría de mí».
Antonio Porchia
Levántate, único pájaro del diluvio
acierta a rescatarte
en las migajas de un recuerdo ajeno
Quizá el agua haya borrado todas las discordias
y la piedra destinada a ultimarte
se convierta en punto de partida
No las alas, quedará el viento
testigo de tus vuelos rotos
y del olivo que sigues cuidando
para el día de tu propio recuerdo.
LAS QUINCE
«Pero las adolescentes son otra cosa
Como una nueva presentación del mundo»
Atilio Jorge Castelpoggi.
Esta es la rara hora
de reír
con la boca que no se sabe
milagro a punto
por eterna y única vez
de soñar una verdad
sin números y sin espinas,
hasta que el rocío evapore su tregua
la hora franca
la última mirada limpia de Lot
esa es la hora que se vislumbra tarde
siempre tarde
la llaga que ilusiona
la imposible magia
querer escapar hacia el paraíso
por un camino hiriente
de sal.
De: Punto Rojo (2005)
HISTORIA NATURAL
Lejos de la colmena,
surcando los aires de mayo
una abeja acopia néctar
acaso por última vez.
Y aun así ¿sería cierto su final?
Yo, fijo en lo que cambia, pienso en mí
y solo concibo el furor del tiempo;
ella, fluye en el dorado instante
junto al dulce ritual del polen.
Parece eterno ese sueño otoñal:
sabe ignorar lo que daña
y apenas busca, levedad de levedades,
su exacta porción de miel.
JUEGOS DE MANO
Deleito el tacto de la soledad
Juan Ramón Jiménez
Dar en el blanco
(y en cuanto color se desee)
es un bello juego de a dos:
palpar, extraer, sucumbir
feroz y dulcemente.
Alfa y omega, opuestos gozándose,
recreando en su abismo el universo.
O es apenas juego de a uno:
síntesis,
cifra primordial del depuesto.
Fantástico a la fuerza,
mimándose con arte
aunque mil manos lo aparten.
Palmo a palma,
un virtuoso de la necesidad
haciendo de la ausencia
desbordante caso omiso.
HEGESÍAS EL SUICIDA
Si cierro los ojos
el paraíso
es un día agobiante
que detiene su marcha.
De: Material de interiores (2010)
INÉDITOS
DERIVA
Millones se persignan ante Cristo,
millones reverencian a Mahoma.
Son legión los devotos de un axioma
o un ideal apenas entrevisto.
La muerte es incesante: a diario asisto
a su tenaz oficio de carcoma.
Porque reside en cada cromosoma,
sin algo más me siento desprovisto.
Y como tantos, creo que ahora creo
o creo de verdad sin darme cuenta.
¿Quién distingue un abismo de un deseo
cuando busca la costa en la tormenta?
Al vaivén de la fe, floto o flaqueo:
¿es su indecisa luz la que me orienta?
LA VÍA RÁPIDA
Entrevero de idas y venidas,
turbio, pringoso, fétido, cargado,
el vagón es un ámbito cerrado,
repleto de bostezos y caídas.
Entre sus bordes se amontonan vidas
que apenas sueñan con virar su estado.
Ganan tiempo; cabezas de ganado
marchando al matadero mal dormidas.
Junto a quien vende pena en caramelo,
mostrando el sexto hijo y la testuz,
no falta quien se obceca en un anhelo,
e incluso en este pozo ve la luz;
como la anciana que pretende el cielo
predicando la gloria de Jesús.
UNA PARADOJA BORGEANA
Profesaba Platón y el infinito,
pero también el sur y Juan Muraña;
su mente urdió la irrevocable hazaña
de convertir el arrabal en mito.
Universal, porteño y erudito,
lo deleitaba una pasión extraña:
transitar la remota telaraña
de las olas vikingas por escrito.
Quizá gastó sus últimas miradas
sobre una arcaica saga escandinava;
o entre kenningars, runas y baladas.
Mas la ceguera se extendió hasta el colmo:
el mundo de las letras lo admiraba,
excepto unos letrados de Estocolmo.
JOB DESDE LAS CENIZAS
Entonces le dijo su mujer:
¿Aún retienes tu integridad?
Maldice a Dios, y muérete.
Job, 2,19.
¿Cuál voz nos dará dictamen del fin?
Ayer
el polvo ha sepultado diez mil días
veloz como el vino que nadie recuerda:
el destino, ciego lobo, me ha esquilmado.
Tal vez mañana
el poniente disperse las nubes aciagas
y mi ajado hálito ruegue al ocaso
un nuevo amanecer.
Pero hoy
mi mejor costilla habla para mi silencio:
su palabra es látigo de hielo, sombra entre sombras.
¿Me convertiré en su veredicto de tinieblas
o esperaré un milagro mientras sorbo aflicción?...
Habrás
habrás y habré de esperar;
y contra todos los puñales, mujer
acaso sea mi Señor.
MARIANO SHIFMAN, Poeta, Abogado y Licenciado en Letras, nacido en Lomas de Zamora, Provincia de Buenos Aires, el 23 de noviembre de 1969. Recibió premios y menciones en diversos certámenes de poesía y de relatos, entre ellos, los instituidos por las Municipalidades de las ciudades de Tres de Febrero, 25 de Mayo y Morón, Lomas de Zamora y Avellaneda (Provincia de Buenos Aires), por la Fundación “Victoria Ocampo”, la Fundación Argentina para la Poesía, la Asociación “Gente de Letras” por la radio 2X4 en homenaje a los cien años del nacimiento de Aníbal Troilo y por el Colegio Público de Abogados de la ciudad de Buenos Aires, en este último caso en el género cuento. Diversos poemas y cuentos de su autoría han sido publicados en revistas literarias, antologías y sitios de Internet tanto del país como del exterior. Algunos de ellos fueron traducidos al francés, inglés, neerlandés, portugués y catalán. Ha publicado los libros: Punto Rojo (2005), 1er. Premio XI Certamen Nacional de Poesía y Material De Interiores (2010).
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